Desde hace 30 años, cada 28 de mayo se conmemora el “Día Internacional de Acción por la Salud de la Mujer” a propuesta de la Red Mundial de Mujeres por los Derechos Reproductivos, con el objetivo de reducir la brecha de discriminación y violencia que viven niñas y mujeres por su condición de género en todo el mundo.

 

En nuestro país existen miles de mujeres que aún no tiene garantizado su derecho humano a la atención integral a la salud, que implica desde el acceso a la información hasta la asistencia inmediata y eficaz en casos de abortos no punibles, a partir de los obstáculos impuestos por objetores de conciencia y trabas en hospitales públicos. Sumado a la reducción de presupuesto en programas para tratamientos de salud reproductiva, psíquica y social, libre elección sexual, métodos anticonceptivos, maternidad protegida, de fertilización asistida entre otros recortes.

 

En una sociedad en la que cada día se comete un femicidio, urge la prevención y protección contra todo tipo de violencia, implementadas en la Ley 26.485 especialmente la violencia que ocurre al interior de las familias, la violencia sexual y el derecho a una participación igualitaria de las mujeres en las instancias de decisión de políticas de salud.

 

Es por ello que este 28 de mayo, desde UnTER seguimos exigiendo a los Estados nacionales y provinciales el presupuesto necesario para garantizar el acceso a la salud de todas las niñas y mujeres. Como así también urge el tratamiento parlamentario del proyecto de ley sobre Interrupción Voluntaria del Embarazo, la aplicación del fallo de la Corte Suprema de Justicia respecto del artículo 86 del Código Penal, que establece el derecho de la mujer acceder a un aborto legal en casos de violación y determina el protocolo para los servicios de salud respecto de la atención en situación de abortos no punibles.

 

Como así también urge el cumplimiento efectivo del Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable, la implementación efectiva de la Ley Nacional de Educación Sexual Integral, y la plena garantía al derecho a una vida sin violencias para las mujeres, niñas y niños.

 

Gral. Roca – Fiske Menuco, 28 de Mayo de 2017.