Porque ya sabemos que se puede vivir sin violencias, con dignidad, que se puede decidir cómo, cuándo, con quien compartir el camino, porque ya sabemos que la desigualdad mata y que la lucha por una sociedad más equitativa e igualitaria dignifica. Porque nadie se salva ni es feliz en soledad, seguimos fortaleciendo las redes de contención y acompañamiento, no para sustituir lo que el Estado no provee, sino para prepararnos para conducirlo cuando lo recuperemos. Ni un paso atrás es Nunca Más a la injusticia, a la desigualdad, a la violencia. ¡Ni una muerta Mas! ¡Vivas nos queremos!